Un día por una cosa; otro día por otra.
La verdad es que no acabo de meterme de lleno en el trading.
Hoy he comenzado a las 7 de la tarde, para hacer la segunda parte de la sesión.
Lo que me gustaria destacar es la dificultad emocional de volver a entrar en las rutinas del Trading después de haberlo dejado aparcado durante un tiempo.
Conocemos la mecánica; conocemos la teoría; conocemos el sistema. Todo tendría que ser igual.
Pero no lo es. Hoy, por ejemplo, me costaba calcular mentalmente los stops, cosa que tenia muy por la mano. La velocidad de los ticks me parecia más rápida que de costumbre.
Es indudable que si no entrenamos; que si no estamos cada día en la operativa, se pierden reflejos.
Este es un trabajo muy exigente. Pararse y aparcarlo durante un tiempo, a veces va bien, para aclarar ideas y conceptos, pero siempre pagaremos un tributo en esa pérdida o disminución de habilidades que ya creiamos consolidadas.
No voy a comentar operación por operación, como en otras ocasiones porque han sido demasiadas.
Para llevar el cómputo basta un resumen.
Operaciones totales: 8
Positivas : 5
Negativas: 3
Puntos positivos: +6,50
Puntos negativos: -3,75
Puntos netos: +2,75
Un magro resultado, porque si le descontamos las comisiones nos quedamos con 23 dólares. Pero bueno, todo lo que no sea acabar en negativo, bienvenido sea.
No es por poner excusas (o quizás si... no se) pero si se ve el gráfico, con las señales de aperturas, se puede ver que tampoco he acertado con el mejor tramo de la tarde. Estaba el precio bastante lateral y con una dosis de inquietante volatilidad muy molesta.
¿Por qué he sobreoperado? Lo achaco a las ganas que tenía de volver a darle a la tecla, que por otra parte es otra de las debilidades que voy superando. Después de tantos días la recaída era previsible.
Practicamente todas las entradas han sido con señal del sistema, aunque actualmente tengo dos tipos de señales, siendo una más agresiva.
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